09 noviembre 2016

Un optometrista que encontró algo más

Una mamá está invitando a más padres a que lleven a sus hijos a hacer un examen de la vista después de que la optometrista encontró que su hija tenía una rara condicion ocular.

Becky Crossthwaite, de 13 años, empezó a quejarse de dolor de cabeza, pero el médico le dijo que solo eran migrañas y le recetó paracetamol. Pero como el dolor de cabeza continuó la mamá de Becky, Kirsty pensó que necesitaba una nueva graduación de lentes y la llevó con el optometrista.

Cuando la optometrista examinó los ojos de Becky se sorprendió de su aspecto. Kiran Laly dijo: "Le había revisado los ojos cuatro meses antes y estaba bien. Pero en esta ocasión se veía inflamación en el nervio óptico, llamada papiledema. Esta condición es causada por una acumulación de fluídos en el cerebro y es extremadamente rara.

Un optometrista probablemente solo una vez en su carrera vea esta condición." Ella sabía que una causa probable del papiledema es que fuera un tumor cerebral aunque no quiso expresar sus sospechas hasta verlas confirmadas por exámenes médicos en el hospital.

Ahora, Kirsty y la optometrista Kiran Lally llaman a los padres a llevar a sus hijos a exámenes oculares periódicamente. Kirsty dice que no se trata solo de si el niño ve o no, sino que pueden descubrirse cosas que pudieran salvarle la vida como en el caso de Becky.

La optometrista Lally dice que "si un niño tiene algo como ojo flojo y se diagnostica lo suficientemente temprano se puede hacer algo al respecto. "Pero cuando los encontramos a los 15 o 16 años que por primera vez se hacen un examen de la vista, ya es demasiado tarde y afectará su aprendizaje."

El organismo de caridad Eye Care Trust estima que uno de cada cinco niños tiene un problema no detectado con su visión.

De acuerdo a las directrices de evaluación nacionales, todos los niños en edad escolar de cuatro y cinco años deberían tener un examen de la vista. Sin embargo, un reporte del Colegio de Optometristas encontró que menos de las tercera parte de las autoridades locales lo hacen posible.

Los niños no necesitan saber leer para tener un examen de la vista. Si problemas como ojo flojo son detectados antes de que el niño tenga siete años, se pueden corregir con el tratamiento adecuado.

Referencia

Foto de Maggieau